lunes, 30 de noviembre de 2009

BELÉN EN CORRALES: PROYECTO COMUNAL






El Belén que vecinas y vecinos de Corrales, con la participación también de habitantes de otros núcleos aljaraqueños, construye y representa desde hace dos años (éste será el tercero), no solo adquiere valor por la calidad de su resultado, o por la repercusión que va alcanzando (más de quince mil visitantes en 2008), sino, sobre todo, por el modo en que nace, cobra cuerpo y se concreta. Es difícil, en tiempos en que el egoismo se instala en nuestra sociedad, que se desarrollen proyectos comunales, en los que la cooperación, el voluntariado, la capacidad de trabajo, la generosidad, sean los valores dominantes. Buena culpa de todo ello la tiene Javier Gavaldá. Todo proyecto de esta naturaleza necesita un motor que funcione además como eje y aglutinador, y ese papel, Javier lo ha desempeñado (lo desempeña) con inteligencia, con cariño y, a pesar de la relevancia de su papel, con humildad.





Emociona acercarse un sábado o un domingo, del mes de septiembre, de octubre, de noviembre... y comprobar cómo va, desde lo que ya nos ha quedado como estructura permanente, tomando cuerpo, a base de mucho trabajo, todo un poblado palestino. Entre el gesto de esfuerzo y la plasmación de la satisfacción en los rostros de las mujeres y hombres que van, codo a codo, dando forma a la ilusión, transcurren los días, afianzando la sensación de grupo, el espíritu de pertenencia. Y eso es fundamental para hacer pueblo, para cohesionar a nuestra gente, para construir identidad.

Luego está lo que el ojo no ve. Desde los talleres de costura, hasta los ensayos de escenas y diálogos, pasando por ese centro neurálgico que es el taller de José María, lugar de creación y de arte donde los haya.

El próximo día cinco de diciembre, cuando abra sus puertas a quienes se acerquen hasta nuestro municipio, muchas personas admirarán el resultado de ese esfuerzo colectivo. Algunas se quedarán solo con lo aparente, con la belleza del escenario y el buen hacer de quienes representan los diferentes papeles; pero seguro que algunas conseguirán ver más allá y ser conscientes del valor que tiene una iniciativa como ésta, protagonizada por la gente, como un proyecto comunal que reune los valores más importantes que atesora el ser humano, lo que nos ha hecho fuertes como especie, la capacidad de aglutinarnos en torno a la consecución de objetivos con el mejor de los adhesivos: el cariño entre las personas.

Una vez más, mi agradecimiento, la expresión de mi orgullo por pertenecer a este pueblo, y, sobre todo, mi respeto a todas y todos quienes hacéis posible este hermoso ejemplo de arte grupal.

viernes, 20 de noviembre de 2009

MIGRACIONES E INTERCULTURALIDAD


Se celebraron ayer en nuestro Aljaraque (salón de plenos con importante asistencia) las I Jornadas de Migraciones e Interculturalidad, organizadas por la Consejería de Empleo, con la colaboración, entre otras instituciones y entidades, del Ayuntamiento de Aljaraque. Una buena iniciativa, con un mensaje importante: la cultura, por definición, es amalgama. No existen grupos humanos impermeables a las influencias de otros grupos. Así hemos construido, con el encuentro (a veces pacífico, otras no tanto), lo que somos hoy.


Contaba como nuestro municipio encierra pruebas de ese construir sumando, relacionándonos. Desde bien temprano. En el yacimiento arqueológico de "Casa del Rio", fechado en el III milenio antes de Cristo, un poblado de cabañas y otras estructuras situado a orillas del Arroyo del Chorrito (en la actual Dehesa Golf), se encontraron restos de la llamada "red and black", cerámica cocida de una forma peculiar que da a las vasijas un aspecto específico, con borde e interior negro y la restante superficie roja. Según el profesor Escacena, ese tipo de cerámica denotaría la influencia de determinadas formaciones sociales norteafricanas, que habrían llegado, directamente o de manera inducida, a contactar con la población autóctona*.


Hay, a partir de ahí, numerosas evidencias de la presencia en Aljaraque de gentes procedentes de otros pueblos, de otras culturas: griegos y fenicios, romanos, árabes... Llegaron, comerciaron, interrelacionaron, permanecieron... En última instancia, contribuyeron al enriquecimiento cultural de este territorio, a su transformación, a su progreso. Hasta hoy.


Nuestra historia, como todas, esta construida de esta manera. "Nosotros", somos el resultado de muchos "ellos". Y ese hecho, por sí, desmonta todas aquellas visiones reduccionistas del mundo, que pretenden la existencia de razas puras, de pueblos elegidos, de naciones señaladas. Las fronteras son artificiales y han sido atravesadas, y lo seguirán siendo, una y otra vez. Aprender a convivir, aprender del otro, de la otra, entender que en todos los rincones del mundo la gente sencilla tiene los mismos anhelos, las mismas ilusiones, que emprende, cada día, una búsqueda de la felicidad.


La diferencia nos enriquece. Lejos de representar ningún "peligro", supone una oportunidad para crecer, como individuos y como pueblo.


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domingo, 15 de noviembre de 2009

CRISIS Y AYUNTAMIENTOS (III)


La mayor, el eje esencial, es evidente. Hay que cambiar las bases de la financiación local. Eso incluye también las modificaciones normativas que posibiliten una participación alícuota, con base en la prestación de servicios y las competencias, de los ingresos del Estado. En lo referido al territorio, al municipio, varias son las herramientas. La primera, que parte de un adecuado uso de la capacidad de gestión urbanística, la creación de suelo apto para la actividad económica de índole industrial y comercial. El concepto "apto" incluye la ubicación inteligente, basada en un estudio de los flujos de población, de la posición estratégica, de las características socioeconómicas del entorno. No es un sembrar a voleo, no se trata de rellenar el plano con teóricos suelos terciarios que después no van a ser desarrollados porque ya nacieron inviables. En eso consiste gobernar. Con todo, no estamos ante la panacea. Otra vez, los caracteres diferenciadores de un territorio frente a otro van a determinar la propia efectividad de esas medidas. En Aljaraque, área metropolitana, con una situación estratégica como nudo de conexión entre la costa, el occidente provincial y la capital, es más que posible efectuar una planificación de los suelos que incentive la ubicación de empresas, la creación de tejido económico productivo y, por tanto, la disminución de la dependencia existente hasta ahora de lo inmobiliario.

Una segunda línea de trabajo pasa por la búsqueda de nuevos recursos, tanto a través de modificaciones fiscales que adecúen, entre otras cosas, el precio de un servicio a su verdadero coste, cuanto mediante la ampliación de la propia cartera de servicios (sin hacer ascos a las prestaciones contractuales individuales) hacia lo accesorio (salvaguardando los básicos que habrían de ser objeto de un tratamiento basado en criterios de justicia social y solidaridad), como yacimiento de negocio público*. El gratis total (que nunca lo es del todo, dado que existen imposiciones básicas) es profundamente injusto, pero mucho más cuando se refiere a usos o servicios minoritarios en cuanto al número de beneficiarios. Por eso, sufragar con el dinero común la prestación superflua de alcance limitado no debiera ser aceptable.

Es imprescindible, vital diría yo, potenciar la inversión pública, también la municipal. A pesar de las dificultades financieras, aprovechando en cierta forma la solidez de lo público como garantía ante las entidades bancarias, debe llevarse a cabo un esfuerzo inversor destinado, como prioridad, a generar empleo, pero que no debe olvidar (es más debe basarse en ello) la idoneidad de las infraestructuras con relación a la finalidad central, la del cambio de bases. En efecto, la obra pública que se prevea y se realice, necesariamente ha de fundamentarse en la potenciación de un nuevo modelo sostenible, en un nuevo marco de relaciones sociales y económicas sustentable. En esa dirección se han movido los planes E, y en especial el que se desarrollará en 2010 -no olvidemos la etiqueta de sostenibilidad con que nace-. Aunque, ¡cuidado!, es necesario corregir un efecto negativo al que, al menos en el escenario del Plan E (y el PROTEJA) 2009, ha inducido ese esfuerzo inversor de los gobiernos de Zapatero y Griñan. Muchos Ayuntamientos han eliminado su propio esfuerzo inversor y han "cubierto el expediente" solo con lo aportado desde fuera. Error peligroso. Es cierto que no ha aumentado así el nivel de endeudamiento municipal (que tendría que afrontar las actuaciones inversoras a base de préstamos), pero hemos perdido parte del esfuerzo que debía ser realizado. No es hora de pasos atrás o de esconderse, sino de formar parte de la locomotora que nos saque de la crisis actual.




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* Básicamente, aunque podríamos ampliar y pormenorizar (pero no tenemos aquí un formato a propósito), lo contenido en http://blog.pucp.edu.pe/item/6951

sábado, 14 de noviembre de 2009

CRISIS Y AYUNTAMIENTOS (II)


Ahora bien, a ese recorte en el gasto, a esa racionalización, hay que ponerle fronteras. Una de ellas es la que afecta a la plantilla. En muchos Ayuntamientos (no digamos en Aljaraque, con más de 500 personas), el número de efectivos ha crecido de manera excesiva. Otros supieron dimensionar la misma a la principal variable constrictora, cual es la del equilibrio entre el ingreso estable, consolidado, estructural, y los capítulos I (de personal) y II (de gasto corriente), los imprescindibles para funcionar como institución. En aquellos, la tentación de lo que podríamos equiparar a un ERE o un ERTE ha suscitado algún amago en ese sentido. No prosperaron. Y aunque es cierto que ese capítulo de gasto, el referido a personal, está ahogando económicamente a muchos consistorios, la coyuntura, con un nivel de desempleo muy alto y pocas expectativas para quienes buscan trabajo, no es la adecuada para llevar a cabo un adelgazamiento de la plantilla municipal. Digamos que, en cierta forma, independientemente de quién o quienes puedan tener la responsabilidad del diseño erróneo (por inflado) de la RPT, ahora toca aguantar, mantener, si es posible sin renunciar a mejorar la productividad.


Hay otros límites. Algunos tan claros como los que afectan a suministros básicos (energía eléctrica para alumbrado público, por ejemplo), otros, no, por discutibles, menos importantes. Pensemos en aquellos que no son imprescindibles (actividades lúdicas, en menor medida las culturales), pero que están tan instalados como demanda social que son difícilmente evitables (podrán ser objeto de austeridad, pero nada más).


Con este panorama, el desequilibrio en la balanza ingresos - gastos está garantizado en la inmensa mayoría de los casos. Su nivel dependerá, en cada caso, de los precedentes (cómo se haya gestionado el periodo de bonanza, del peso relativo del urbanismo en cada ayuntamiento...), y de la capacidad de los equipos de gobierno de combinar políticas de austeridad con mantenimiento del catálogo y calidad de las prestaciones.


Instalados en el convencimiento de ese déficit -mantenido en el tiempo que tardemos en recuperar el pulso económico normalizado-, afrontaremos como única solución paliativa (y coyuntural) la del endeudamiento. También aquí la situación de partida dará más o menos posibilidades. En cualquier caso debe ser asumida no desde la inacción del tronco en la corriente, sino con una planificación de la ruta; planificación que debe contener, ineludiblemente, las bases de la solución estructural a lo que podríamos denominar escenario posturbanismo feroz. Y aunque pudiera parecer lo contrario, hay bastante margen, desde lo local, para actuar en ese sentido.


jueves, 12 de noviembre de 2009

CRISIS Y AYUNTAMIENTOS (I)


Advierto desde el inicio (después cada cual es muy libre de comentar lo que quiera) que este artículo no pretende indagar sobre la génesis, la evolución, las responsabilidades, o los modelos de solución a la crisis económica. No se trata (insisto en que el comentario es libre) de reproducir aquí debates de rango estatal o autonómico entre nuestra formación política y el PP acerca de aquellas cuestiones. Me interesa responder, si es posible, a una pregunta en apariencia más sencilla, más de andar por casa, ¿qué se puede hacer desde un Ayuntamiento para paliar los efectos de la crisis en su territorio? (nadie pretenda exigirles/nos la solución global), si es que se puede hacer algo.



Los elementos de carácter general a tener en consideración no son demasiados. Los Ayuntamientos tienen una capacidad limitada para generar recursos propios. La parte de fiscalidad que manejan es minúscula en el conjunto de la recaudación pública. Por otro lado, los efectos de la subida, al afectar a cuestiones muy básicas de la ciudadanía, muy culturalmente próximas, suelen devenir en un malestar entre contribuyentes que puede considerarse electoralmente arriesgado (elemento éste también a tener en cuenta. No solo gobierno para captar votos, pero necesito captar votos para gobernar, es decir para poner en práctica el modelo político que defiendo). Hasta ahora, en aquellos municipios en que el crecimiento urbanístico (en muchas ocasiones especulativo y rapiñador) ha sido elevado, los ingresos provenientes de la venta de suelo y los impuestos a la construcción han servido para financiar los gastos municipales (no hablo de la gestión, mejor o peor, que después se hiciera con esos dineros), pero eso, en la generalidad de los casos, se acabó -tenía que acabarse necesariamente, con o sin crisis-, y puede (ojalá sea así) que no vuelva nunca a los niveles que en algunos casos alcanzó (por ejemplo, el nuestro). La perversión es que se estaban contrayendo obligaciones de gasto estructurales, afrontadas con ingresos coyunturales (¿y cuando éstos se acaban qué?).



Las transferencias desde el Estado o la Comunidad Autónoma (aún reconociendo el esfuerzo creciente de la Junta) se demuestran insuficientes para sufragar los costes de plantilla y gasto corriente necesarios para prestar un catálogo de servicios a la comunidad cada vez más extenso y más consolidado en su demanda. Existe un amplio consenso en la necesidad de modificar el modelo de financiación municipal, incrementando su peso en el presupuesto global de las administraciones. Con todo, habiendo iniciativas en ese sentido ya en marcha, tardará un tiempo hasta que se produzca ese cambio legislativo en favor del municipalismo. Y no podemos pararnos a esperar que la solución (seguiremos exigiéndola) venga por ahí. Hay, entretanto, que actuar.



La primera medida es muy evidente: recortemos el gasto. Ya que tenemos dificultades con los ingresos, apretémonos el cinturón, y gastemos menos. Primera e importante disyuntiva. ¿Qué quitamos?, pero qué quitamos sin disminuir el nivel de prestación de servicios ¡ojo!. Y se pueden hacer cosas, y se hacen. Pero eso no es la panacea; es más, supone un recorte aún pequeño para nuestra necesidad de equilibrio. Gestionemos mejor el gasto que es, ahora ya sí, imprescindible (siempre, como digo, que queramos mantener servicios). Economía de escala, selección de proveedores, estudio meticuloso de las posibilidades del mercado, optimización de existencias, rentabilización de lo adquirido... Trabajando con seriedad (y con honradez) se puede disminuir, de manera apreciable el consumo.

domingo, 8 de noviembre de 2009

UN PLENO IMPORTANTE (y II)


El cambio en la Ordenanza que regula lo relativo, entre otras cosas, a la gestión de residuos, va a posibilitar un mayor control sobre determinadas prácticas incívicas, cuyo principal exponente es la colocación, extemporánea o en lugar o forma inadecuados, de restos diversos (desde basura orgánica, a mobiliario, pasando por la poda). Uno de nuestros objetivos es la mejora de la limpieza en nuestras islas ecológicas. Para ello, además de este cambio en la norma, insistiremos en la información a la vecindad; al tiempo, comenzará un nuevo servicio de mantenimiento permanente de los contenedores que nos asegure la mejor atención a la ciudadanía. Junto al inicio de las obras del Punto Limpio de Aljaraque, que construye en terreno municipal de La Raya la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, se dibuja un escenario de promoción de la recogida selectiva y el reciclaje, en linea con lo que queremos: un municipio cada vez más comprometido con la sostenibilidad.



La aprobación del pliego de condiciones para el concurso público que tiene por objeto la concesión del servicio de la Escuela Infantil Municipal, es un paso importante para la puesta en marcha de un centro muy querido por nosotros. De hecho, representa claramente la apuesta por lo social que, desde el primere día, ha sido norte de la nueva forma de gobierno, de progreso, instalada en nuestro Ayuntamiento. La Educación, pieza fundamental en el avance de una sociedad, tiene, en estos niveles, un papel añadido. El que posibilita a padres y madres dedicarse a su actividad laboral con la tranquilidad que proporciona saber que sus hijas e hijos están educándose mientras reciben los cuidados profesionales adecuados, en un marco afectivo y de seguridad.


El edificio de la nueva Escuela Infantil, levantado gracias a la subvención de un millón doscientos ochenta mil euros concedida por la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, está muy avanzado. El trabajo realizado por nuestra empresa municipal GESA ha resultado de gran calidad y estará acabado en plazo, lo que garantiza su pleno funcionamiento para el próximo curso. El objetivo es firmar el convenio con Educación antes del proceso de matrícula del mes de abril de 2010.






El inicio del proceso de negociación con la Consejería de Obras Públicas para la cesión por la misma a nuestro Ayuntamiento de la actual A 492, desde el punto kilométrico 0, en Corrales, hasta el 3'5, a la altura de Pabama, y su conversión en una vía urbana, podría tener una importancia determinante en la cohesión de nuestros núcleos. Imaginemos un gran bulevar en todo ese recorrido, via desdoblada al menos hasta Bellavista, núcleo éste al que habríamos proporcionado una alternativa de entrada y salida a la actual de la Avenida de los Príncipes. Se trata, qué duda cabe, de una propuesta estratégica en el diseño de ciudad que venimos realizando.


Como puede verse, Aljaraque se mueve y a buen ritmo.

sábado, 7 de noviembre de 2009

UN PLENO IMPORTANTE (I)

Sucede que, en una dinámica que yo calificaria de distorsionada, algunos Plenos Municipales (por aquello de ser puntos de cierre del Orden del Día) dan la engañosa sensación de haber producido un debate entre las fuerzas políticas locales con cierto grado de vehemencia. Si uno se para, no obstante a observar con detalle, comprueba que suelen referirse -en la inmensa mayoría de las ocasiones- a temas que se deciden, o cuya competencia está, lejos de aquí. Instamos, solicitamos, exigimos, denunciamos... Esos árboles ocultan bosques ricos en decisiones de ámbito municipal. Lo que se hace realmente, lo que es nuestra competencia estricta. Los temas de carácter general nos interesan (prueba de ello son los propios debates), pero lo que nos concierne tiene, qué duda cabe, mayor relevancia.

Este último Pleno del mes de Noviembre ha sido, en ese sentido, muy importante. Aparte temas algo más de trámite, quisiera centrarme en algunas cuestiones tratadas que demuestran el altísimo nivel de trabajo que existe, en estos momentos, con un equipo de gobierno dinámico, en nuestro Ayuntamiento. Fruto del trabajo de políticos y también de profesionales comprometidos. Tenemos alguna muy buena gente en nuestras filas. Gente capaz de emocionarse (algo que no debe perderse nunca) ante un logro, no para ellos, no para ellas, para el pueblo. Satisface comprobarlo desde la responsabilidad política.


Empezaré por la modificación puntual número 4 de nuestro PGOU. Labor fundamentalmente del área de urbanismo, representa una proyección del modelo consensuado, dentro del equipo de gobierno, para el territorio. Sus ejes: la búsqueda y obtención de suelo VPO, la liberación de espacios que antes eran urbanizables residenciales o dotacionales para crear zonas libres o espacios de recreo, la mejora de accesos y ordenación de zonas destinadas a actividades económicas, la provisión de nuevo suelo dotacional (escolar, recinto ferial)... En definitiva, la apuesta por una ciudad más compacta, más humana, más respetuosa con su entorno, más pensada para el progreso social.


Aprobada inicialmente (quedarán aún la provisional y la definitiva), abre ahora un proceso de debate público, en el que las aportaciones de los colectivos y las personas mejorarán, sin duda, el texto inicial propuesto. Se quiere un procedimiento participado, para lo cual la difusión será objetivo prioritario. Es tiempo de hablar.

domingo, 1 de noviembre de 2009

APRENDER

Inmersos como estamos en plena crisis (de origen financiero) internacional, uno espera reflexiones serias para salir de ella y, sobre todo, para no volver a repetir los errores cometidos. Por eso asiste con cierta estupefacción al goteo de indicadores clásicos a la hora de evaluar como van las cosas. Continuamos valorando el euribor, el índice de precios, la evolución de la bolsa, el precio del petróleo, el valor del dolar frente al euro, no digamos ya las previsiones del FMI o del Banco Central Europeo... Entretanto, se vuelve a remuneraciones millonarias (si se fueron alguna vez), al tiempo que la situación de muchas familias es complicada. No se atisba, pues, un cambio de valores. Tal vez sea esto lo más preocupante.

Muchas voces afirman que nada volverá a ser igual; por contra, la extraordinaria volatilidad de la memoria colectiva (suma de individuales) nos prepara para tropezar de nuevo en la misma piedra. Nos decimos: este nivel de consumo desaforado es INSOSTENIBLE, y tomamos tímidas medidas, en ocasiones solo maquillaje para tranquilizar nuestras conciencias. Cuidamos algo más nuestros hábitos, reciclamos parcialmente, procuramos gastar menos agua, o compramos coches híbridos. Parece mucho más difícil un cambio profundo, radicular.


Siendo pragmáticos, para no caer en la melancolía de la persecución utópica, cuantos más elementos hacia la sustentabilidad pongamos en juego, tanto mejor. Pero eso no es una responsabilidad del otro, de la otra, o de la cosa pública; aquí toda la gente tiene su papel. Cierto, cada cual en su nivel, pero a nadie es ajeno. De ahí la necesidad de un gran compromiso social, que necesariamente debe comenzar por quienes puedan ser referentes en distintos campos, pero que debe alzanzar hasta la última ciudadana, hasta el último ciudadano. De lo contrario, la técnica retrasará el colapso, eso seguro, pero igualmente cierto es que llegará.